Es la más conocida y difundida a nivel nacional y solía tener como temporada los meses de noviembre y diciembre. Se bajaban los furros el 18 de noviembre, día de la Virgen de Chiquinquirá, y se subían el 2 de febrero, fiesta de la Candelaria.
Durante muchos años se utilizó como recurso publicitario de los comerciantes para promover sus mercancías, pero hoy día la gaita toca cualquier tópico y se utiliza como medio de protesta o de denuncia social. Se llama gaita de furro, porque es el nombre que localmente se le da al furruco y también se le denomina gaita maracaibera, aunque algunos autores señalan que es propia de la parte norte de la región y no sólo de Maracaibo. Tradicionalmente tenía como instrumentos el cuatro, el furro o furruco, la tambora y la charrasca, pero actualmente la mayoría de los grupos urbanos han incorporado las congas, teclados y bajo eléctrico. Tiene una estructura formal de estrofa-estribillo, el primero entonado por un solista y el segundo por el coro. En las estrofas se utilizan 4 versos y en el estribillo de 4 a 6 versos, ambos con métrica octosílaba, aunque puede utilizarse combinaciones versos. La base rítmica es de 6 x 8, aunque abundan versiones antiguas de 2 x 4.